El número de personas que padecen enfermedades cardiovasculares, presión arterial alta, diabetes mellitus tipo II y EPOC aumenta cada año en todo el mundo. Las consecuencias son una reducción de la calidad de vida y una menor esperanza de vida, así como enormes cargas sanitarias y económicas.
Utilizando los últimos enfoques de tratamiento telemédico, los médicos, las clínicas, las instituciones de investigación y los proveedores de atención médica trabajan para mejorar la situación del suministro y mejorar la calidad de vida de los afectados. Es fundamental para el éxito de los enfoques telemédicos contar con soluciones fiables y de funcionamiento uniforme que sean fáciles de usar. Además, estos deben poder adaptarse individualmente a los requisitos del concepto de atención y enfoque de tratamiento.